domingo, 27 de septiembre de 2009

La mente controla todo!


Hola, hace mucho que no publicabamos una nueva entrada, la verdad, no hay nadie que vea nuestro blog... pero por si acaso... habra informaciones sobre la diabetes y recomendaciones.

Como saben, la mente es muy poderosa, estudios cientificos lo han comprobado, pero por ignorancia... no usamos la mente como debe ser. Si lo utilizamos de manera apropiada podremos hacer cosas de lo mas minimo hasta lo mas dificil e incluso controlar... y curar la diabetes. Pero tambien, adelgazar sin hacer tanto ejercicio, pero eso si, comer sano.

Sabemos que con la diabetes, entre mas unidades pongas de insulina a tu cuerpo, NO ENGORDA POR SI SOLA, pero sumada a un aumento de la dieta, más una disminución del ejercicio (que es causado por muchas personas, por cansancio que da un aumento de insulina), hace que probablemente subas de peso.

Haz ejercicio y si necesitas cambiar tu dieta, cambiala.

Para poder adelgazar es inportante entender como se crea la grasa en el cuerpo.

La idea es que una persona logre el ritmo de su metabolismo para ir “quemando” la grasa que tiene su cuerpo de sobrepeso mientras evita la acumulación de nueva grasa y perjudicar la diabetes.

La grasa es necesaria. Es una sustancia que protege los órganos, que nos da protección del frío y que guarda dentro de si un potencial de energía. Si viniera una época de severa escasez de comida los primeros en morir de hambre lo serán los “flacos” y los últimos que van a morir son los “gorditos”. Cuando el cuerpo no tiene más remedio utiliza su grasa como fuente de energía para sobrevivir. Los osos hibernan por largos meses y durante todo ese tiempo sus cuerpos van consumiendo la grasa almacenada. Por eso el oso empieza su sueño de hibernación estando básicamente obeso y despierta de su sueño como un oso delgado.

Por muchos años se nos ha vendido la idea de que es la grasa la que ocasiona más grasa. Como público consumidor hemos creído esa idea al punto de que hoy en día consumimos menos grasa que antes. La constante publicidad nos ha hecho conscientes de la realidad que nos querían inculcar: “la grasa es la que engorda”. Sin embargo esto es una “media verdad”.

Una “media verdad” es algo que contiene una cierta porción de una verdad pero algo que a la misma vez no es 100% verdad. Es como si nuestra pareja nos dijera “yo te quiero” cuando que en realidad lo que quería decir es “yo te quiero si haces lo que yo te digo y nunca me llevas la contraria”. Tomar el “yo te quiero” como si fuera una verdad absoluta sería un grave error.

El dato de que las grasas engordan es una “media verdad”. Contiene suficiente verdad como para haber pasado por verdad por muchísimos años pero hoy en día los por cientos de sobrepeso y obesidad de la población demuestran que esta no era una verdad absoluta. Era una “media verdad”.

Es verdad que la grasa nos puede engordar. Pero, para que ello sea posible debe estar la hormona insulina presente. Sin la hormona insulina presente en la escena la grasa no nos puede engordar.

Por ejemplo, se sabe que los esquimales originales son tribus nómadas. Se sabe que lo único que podía comer un esquimal estaba limitado a lo que se podía conseguir en la región del polo norte. En el polo norte, bien al norte, no hay tierra para sembrar ni para crecer planta vegetal alguna. En el polo norte sólo existe nieve y hielo. Los esquimales siempre sobrevivieron cazando y pescando y animales para usarlos de alimento. Un esquimal nómada hacía siempre su desayuno, almuerzo y cena comiendo lo que podía pescar o cazar. Lo que utilizaba de alimento siempre era pescado, focas, osos polares y un tipo de ciervo llamado “caribou” que ronda las planicies del polo norte. En fin, lo único que comía un esquimal era carne o grasa. No existen los carbohidratos en el polo norte, solo carne y grasa de la que está contenida en las carnes de esos pescados y animales.

Observando la dieta alta en grasas de los esquimales nómadas esperaríamos encontrar a una gente muy gorda entre ellos. Sin embargo nunca existieron esquimales nómadas que estuvieran ni con sobrepeso ni con obesidad.

Hubo un científico investigador de nombre Henry Stephenson que entre los años 1875 y 1876 viajó al polo norte y vivió con los esquimales por 2 años. Durante este tiempo Stephenson comía lo mismo que comían los esquimales, carne y grasa. A Stephenson le sorprendió muchísimo el hecho de que en esos 2 años que estuvo alimentándose solamente de carne y grasa perdió más de 40 libras de peso y su cuerpo se puso esbelto. En aquella época Stephenson escribió un libro sobre su descubrimiento de cómo la dieta de carne y grasa le había reducido la grasa del cuerpo.

Se sabe también que la tribu de los Masai en África por muchísimas generaciones ha sobrevivido en salud utilizando únicamente a su ganado como alimento. Los Masai comen la carne de su ganado y toman también su leche y su sangre. Los Masai siempre fueron reconocidos por las otras tribus como fornidos y delgados guerreros que son respetados por todas las otras tribus. Inclusive hace unos años se le practicaron pruebas de colesterol a las tribus Masai y encontraron que ninguno de los miembros de la tribu tenía niveles de colesterol anormalmente altos.

Debido a la forma en que funciona el cuerpo humano la grasa que contienen los alimentos no se puede convertir en grasa para nuestro cuerpo a menos que exista mucha insulina presente. La insulina solamente se produce en grandes cantidades cuando ingerimos carbohidratos refinados. Sin la ayuda de la insulina las grasas que consumimos no se pueden acumular en nuestro cuerpo. Es por esto que una carne de cerdo bien grasosa solamente nos podría engordar si la combinamos con alguno de los carbohidratos que fuerzan al cuerpo a producir insulina. La carne de cerdo con grasa de por sí sola no nos puede engordar.

El problema del sobrepeso y la obesidad no ha sido causado por las grasas que consumimos. Ha sido causado por la combinación entre grasas y carbohidratos refinados. Por ejemplo, almorzar o cenar unas tajadas de pizza (grasa con pan) sería una forma segura de acumular grasa en el cuerpo.

Se pueden consumir grasas sin que ello signifique que vamos a engordar. Lo que no es inteligente es combinar grasa con carbohidratos refinados.

Combinar carbohidratos refinados con grasa es una forma segura de EMPEORAR LO QUE YA ESTÁ MALO. Si usted desea adelgazar tiene que entender que la grasa de por sí no es lo que engorda. La grasa sin la ayuda de la insulina que produce su cuerpo cuando usted consume una buena dosis de carbohidratos no le puede engordar. Disfrútese esa chuleta de cerdo frita con una buena ensalada. Pero, cuidado con esa carne frita si la combina con un plato de arroz con habichuelas.